Dєנαятє Dє Aмαя [cap 2] [ K ] [ SasukeXSakura ] [ Romance/Drama ]

Había sabido desde el principio del oficio que se le había mandado, fui la primera en saber de su regreso fielmente confirmado por la Hokage, mi maestra, una de las personas a las que más agradezco quien soy: una de las mejores Kunoichis de todo el mundo ninja, superando a todas las de mi generación, las anteriores y las que le siguieron, incluso varios aseguran que mejor que la misma Godaime, que había superado a mi maestra, como todo buen alumno. La mejor Medi-ninj de todo el mundo, capaz de crear enormes grietas en la tierra con solo mi puño, de partir una dura roca en dos, y de destajar cada árbol en mi camino, pero todo eso no me había servido para traer a Sasuke de regreso a la aldea.

Después de cuatro años, la guerra ninja y todo ese enredo, tanto Naruto como yo, nos dimos por vencidos, sí, vimos que él realmente no quería volver a Konoha, con nosotros. En un principio fue duro, pero ya nos habíamos acostumbrados a su falta de presencia, sobre todo después de la guerra, donde nos unimos aun más a nuestra generación y otros ninjas, juntos reconstruimos la villa después de todo el ajetreo, que para nuestra suerte, Konoha no había sufrido tanto como después de la invasión de Pein.

Nuestros lazos con otras aldeas habían aumentado al mismo tiempo que la guerra llegaba a su final, no fue sorpresa que muchos de nuestros Shinobis contrajeran matrimonio después de un tiempo con Kunoichis de otras aldeas, o bien, al revés, estas uniones crearon lazos más fuertes, y así fue como yo, Haruno Sakura, termine como jefa de "Relaciones Exteriores" o algo así.

Mi trabajo era realmente divertido, es decir, tampoco esperaban que hubiera terminado tras un escritorio, ¿verdad? Aunque con la Hokage como mi maestra, yo era algo así como lo que llaman "Ingeniero IBM" un puesto claramente importante, ¿no les lleno la curiosidad saber que es un Ingeniero IBM?, es la propia burla de Shikamaru hacia mi trabajo, así es, ese flojonazo se había convertido en un gran amigo mío, ¿Por qué Ingeniero IBM? -cuando lo supe, el pobre del chico problemático paso una semana en el hospital- bueno, soy ingeniera IBM porque eso es lo que hago.

"aa.. y Sakura, y veme a traer los archivos de las nuevas misiones"

"… Sakura y veme a llevar estos archivos a la Mizukage personalmente…"

Y la lista sigue y sigue. Me encargaba en parte del Hospital, misiones Rango S, generalmente en compañía de Naruto, Neji o Shikamaru, ellos se habían convertido en mis principales compañeros. Los cuatro éramos ANBUs de elite. Pero la hokage comúnmente me encargaba "misiones especiales"

Bastante simples, pero comúnmente agotadoras, ya que yo era así como una representante de ella con total autorización, aunque claro, eso también era una estúpida escusa para librarse de las "aburridas cenas aristócratas" como las llamaba ella.

Esa era una parte aburrida de mi vida, y hasta cierto punto molesta, ya que aunque fuera mujer, no faltaban los chicos "pesados" con mayores intensiones a una amistosa cena. Ya que me veían como un buen partido y prospecto como futura esposa de alguno de ellos, y eso se incrementaba en aldeas vecinas, y tampoco habían faltado los señores feudales que mandaban cartas para crear alianzas de la hoja y pequeñas aldeas mediante un matrimonio arreglado, incluyendo el nombre Haruno Sakura en ellas.

Pero nunca había aceptado ninguna proposición formal ni nada, tampoco es que me haya llamado la atención nadie, mi único propósito había sido –Sacar a Uchiha Sasuke de mi mente y mi Corazón- Kakashi y Naruto nunca me molestaban con los temas amorosos, ya que según ellos, aun era muy pequeña -19 años- para estar pensando en algo como novios. Pero Ino, Temari incluso Tsunade-sama ya habían hablado del tema, diciendo que ya tenía edad –repito, 19 años- para comenzar con una relación, alegando que después no iba a salir ni en rifa con boletos regalados.

Y lo había logrado, había sacado a Sasuke Uchiha de mi mente…

Pero no de mi corazón.

Cuando llego, no quise ir a recibirlo, entre menos lo viera, iba a ser mejor para mí, además, tampoco venía solo.

- veras que soy realmente bueno en engañar y hacer sufrir y hacer llorar a quien más quiero..

Vi como se alejaba, como en un par de largas zancadas recorría la distancia que lo separaba de mí, y la puerta, no volteo en ningún momento, pero si vi como la puerta se cerraba lentamente tras de él, como al final de quedar cerrada, el pomo dorado regresaba a su posición inicial, con ese leve sonido que indicaba que, efectivamente, la cerradura estaba haciendo su trabajo, que ya no había vuelta atrás. Que la persona que acababa de cruzar la salida, ya no iba a volver. Que Uchiha Sasuke no iba volver.

Y fue en ese preciso instante, en el que el sonido producido al cerrar de la puerta quedo sonando en eco en mi cabeza que me di cuenta de lo mucho que había soñado este momento, pero no era como lo vi en ese sueño, él no era así, yo no era así. Y eso basto para darse cuenta que los años no pasan en vano.

-no… no por favor… no otra vez… -recordé las palabras que le había dicho, pues sabía lo que venía, lo que me esperaba, lo que por tantos me hizo sufrir, recordándolo cada noche. Nuestra despedida. –no lo hagas… te lo ruego…

Esa noche, cuando le había dicho que me llevara con él, yo hablaba en serio, aunque mi voz no hubiera sonado como tal, lo único que recibí fue un "gracias"

La palabra que me encerró en una burbuja de infelicidad, que iba con migo a donde sea, y que me había alejado de él.

Después de tantos esfuerzos por olvidarlo, vuelvo a ser la misma chiquilla de doce años, que un día lloro por su ida, y hoy llora por su regreso.

Esa que lo único que consiguió fue dolor, un dolor puro, que no le deseaba a nadie.

Mientes, me haces daño y luego te arrepientes

ya no tiene caso que lo intentes

no me quedan ganas de sentir

Pero aun no aprendía la lección, después de todo, si no la aprendes, tienes que volverla a vivir, como en la academia ninja, si no pasas los exámenes finales, tienes que repetir el años hasta que realmente lo apruebes.

-Yo… te deseo que seas feliz, muy feliz con Gaara…- - sus palabras me habían dolido, y es que sé perfectamente que rumores circulan por ahí, y nunca les había tomado importancia, Gaara y yo éramos grandes amigos, más ninguno le tomaba importancia a rumores sin sentido, según muchos, ya era increíble que un chico de su edad manejara una aldea, y que una chica de mi edad tuviera tantos créditos como los que tengo, que era perfecto para mí, que formábamos la pareja ideal, chismes de ese tipo, sobraban, pero nunca los tome en cuenta.

Y si, Gaara era una persona muy… linda. Tenía muchas atenciones con migo, siempre trataba de hacerme sentir feliz cuando veía que no lo estaba. Siempre sabía cuando una sonrisa era fingida o cuando era verdadera.

Llegas cuando estoy a punto de olvidarte

busca tu camino en otra parte

mientras busco el tiempo que perdí

y hoy estoy mejor sin ti.

Siempre trate de ver a Gaara como algo más, pero nunca pude, y tampoco lo hacía notar, no quería que se sintiera obligado, o mucho peor, usado, el no se lo merecía. Y lo confirme cuando volvió Sasuke.

Que todos esos esfuerzos son en vano. Ese fue tiempo perdido, que nunca voy a recuperar.

Voy de nuevo recordando lo que soy,

sabiendo lo que das y lo que doy,

el nido que buscaste para ti y... y...y...

Pero esos hermosos ojos Onix no son para mí, no lo son y nunca lo fueron, solo es mi estúpida imaginación que juega sucio con migo, y ese no es un problema de ahora, lo fue siempre, hoy, ayer, y hace años.

Y el tiempo hizo lo suyo y comprendí

las cosas no suceden porque si,

no eres la persona que pensé, que creí, que pedí.

Siete… Siete años… que rompieron al equipo en pequeñas fracciones, que nos separaron, después de todo, el tiempo no pasa porque sí, y todos seguimos un destino, uno que nadie maneja, que por más hilos que mueva, se queda así.

► Dejarte de Amar…-……-…Fin Sakura Pov´s…-……-… Dejarte de Amar◄

Mientes, me haces daño y luego te arrepientes

ya no tiene caso que lo intentes

no me quedan ganas de sentir

un alba brillante nació, después de una tormentosa noche, bastante ajetreada para muchos, testigo de la primera lagrima de un azabache bastante agitado después de recorrer la aldea con el corazón queriendo salir de su pecho, de una triste chica que lloro hasta quedarse dormida en el mullido sillón de la sala de su casa, y de un pelirrojo con amarga sonrisa al ver tal escena.

-¿qué es lo que pasa, Gaara-kun? –hablo una rubia de coletas a la habitación que siempre reservaba para su hermano pequeño cuando iba a la aldea. Se había preocupado al pasar de las seis y media, y que su hermano aun no estuviera abajo pidiendo silenciosamente su desayuno. Y lo que vio, la dejo de cierta forma perturbada.

Gaara se encontraba sentado en el marco de la ventana, viendo a la nada.

-¿Gaara? –volvió a preguntar al no obtener respuesta.

-ee.. Lo siento, ¿Qué pasa Temari? –le pregunto saliendo de su estado de limbo.

-eso mismo me.. –dijo en voz poco audible, pero vio los ojos de desvelo de su hermano, decidió quedarse callada –solo te venía a decir que el desayuno ya está listo.

-gracias, ahorita bajo –se excuso.

Había estado toda la noche viendo hacía la casa de su pelirosa amiga, estaba triste por ella, quería ir a abrazarla y decirle que contaba con él, ella era la primera persona que lo inspiraba a hacer algo como eso, no había sentido tanta soledad de alguna forma desde que vio partir a su hermana a Konoha cuando se caso con el ninja vago.

Pero cuando desde lejos vio a Uchiha brincar torpemente los tejados sintió que algo estaba mal, mas sabía muy bien que no debía meterse, el sabía lo mucho que aquella pelirosa quería a ese ninja con el que se enfrento en los chunnins.

-Sakura-chiannnn! –grito un rubio desde la puerta de una residencia familiar de la villa. Estaba ansioso porque esa puerta se abriera, y no iba solo, en sus brazos llevaba a una hermosa chica de cabellos negros azulados -Sakura-channnn!

-creo que aun es muy temprano, Naruto-kun –decía algo apenada la chica.

-¿Cómo que es muy temprano? Seguro que Sakura-chan se alegrara de saber la noticia.

-pues yo creo que deberíamos esperar, lo más seguro es que aun este dormida, hoy es su día libre, y ala mejor ella quiere descansar.

-¿Qué pasa Naruto? Son las 7:30 de la mañana, creo que hasta para molestar hay horarios –dijo la chica desde adentro, acababa de salir de un baño que baya que necesitaba, ya iba vestida con unos jeans y una playera manga corta semi-ajustada al cuerpo color negra con el símbolo de su clan en la espalda y al frente el contorno de unas flores en rosa palo.

-pero te tenemos una súper noticia, Saku-nee-chan –hablo el rubio haciendo un puchero cuando vio a su amiga aun secándose el cabello con una toalla rosa.

-pues espero que sea algo bueno, Naru-Bakka –se quejo la pelirrosa dándoles acceso a su casa.

-no lo escuches amorcito, tu padre es un hombre importante en la aldea. –dijo llorando y abrazando a Hinata, más bien a su vientre, haciendo que la cara de Sakura pasara primero por la duda, y después por la sorpresa.

-Hinata… ¿tu…? –trato de preguntar la pelirosa, pero al ver el asentimiento de ella, quito a Naruto y se aventó a abrazar a su amiga, con sumo cuidado de no dañarla.

-neee… Saku-chan… ¿Por qué a mí no me felicitas? –hablo con lagrimas en los ojos el rubio.

-vamos bakka… tu también –dijo tomándolo y haciendo un abrazo de tres, y uno en camino.

El motivo de celebración había sido grande, muchos sabían que no faltaba mucho para que Naruto Uzumaki fuera Hokage de la aldea, y el hecho de que estuviera esperando un hijo, o su esposa, mejor dicho, era aun mayor, la noticia paso volando por toda la aldea, tanto que se había hecho una reunión en la casa de la joven para felicitar a los próximos padres.

En la mansión Hyuuga estaban los amigos y compañeros cercanos de la pareja, así como los familiares de la chica juntos en el jardín.

-Felicidades, Naruto, serás el primero en tener un hijo de la generación – lo felicito Ino –seguro que será un bebe muy lindo, lástima que los genes del padre no ayuden mucho.

Llegas cuando estoy a punto de olvidarte

busca tu camino en otra parte

mientras busco el tiempo que perdí

Decir que la celebración era un éxito, era decir poco, se podía decir que medía aldea estaba reunido, pues estimaban demasiado al rubia, y a la linda Hinata, decidí salir un rato al jardín, estaba más que contenta por la enorme felicidad de mis amigos, pero sentía que algo en mi no me dejaba sentir esa felicidad a mi también.

Lleve mi mano a mi vientre involuntariamente, pero me di cuenta que no hacía falta, estaba vacío, como mi corazón en estos momentos. Apreté los ojos para evitar soltar una lagrima al darme cuenta de lo miserable que era mi vida en estos momentos, sola, sin nadie a mi lado, pero con deseos de tener unos fuertes brazos que me hagan sentir protegida en momentos como estos.

Pero no los tenía.

-Sakura… -escuche una voz detrás de mí, instantáneamente me puse completamente recta, y lleve mis manos a mi pecho, para mi suerte mis lagrimas habían cesado, pero aun así, escuchar la voz de él en estos momentos no me ayudaba. –yo… lo siento por lo de ayer –hablo rápidamente, pero aun así, Sasuke estaba pidiendo perdón, a mí.

No sabía qué era lo que había pasado en todos este tiempo, ¿Sasuke había cambiado?

No, no podía cambiar así no más.

-¿qué pasa, Sasuke? –le pregunte en tono seguro y casi tan frio como el que usaba cuando mi rostro estaba escondido tras aquellas mascara ANBU.

Vi como sus fracciones se tensaron ante mi voz, pero no le tome mucha importancia, no podía mostrarme débil, no podía dejar romper –de nuevo- la burbuja de mis sentimientos y echarme a llorar de nuevo sobre él.

-¿qué es lo que te pasa, Sakura? –me pregunto furioso, sus cambios de ánimo daban miedo, Sasuke no era de las personas que se dejaba llevar por sus sentimientos, al menos no antes.

-¿qué es lo que quieres que me pase, Sasuke? –le conteste en el mismo tono.

-¿qué te pasa? ¿Por qué actúas así? -pregunto serio, y dirigiendo su vista a otro lado – tu no eras así… -dijo en un susurro, cosa que me hiso enojar.



-¿qué esperabas? –le pregunte con dolor -¿Qué cuando regresaras, Naruto y yo corriéramos a tus brazos? –le pregunte venenosamente. –tu hiciste tu vida Sasuke, hiciste un nuevo equipo, tal vez nos tardo 3 años darnos cuenta de eso, no íbamos a estar esperándote siempre, congelando el tiempo. –Le dije enojada –Hicimos nuestra vida, Sasuke –le dije en un susurro, porque sabía que eso no era del todo cierto, Naruto había encontrado la felicidad en una persona maravillosa como Hinata, pero ella seguía en el mismo vado.